martes, 26 de octubre de 2010

Sobre defraudados, promesas y jóvenes



El 14 de marzo del 2004, desde el balcón del número 70 de la Calle Ferraz, un recién electo José Luís Rodríguez Zapatero dijo: "No os defraudaré"... Hoy, seis años después, la mayoría de los españoles —especialmente los jóvenes— se sienten defraudados o peor aún, engañados.

Y no es que la gente se sienta así porque la cosa vaya mal, muy mal, requetemal; los ciudadanos de a pie están defraudados por los modos y maneras..., por la falta de pudor de un mal trilero al que se le ha visto el truco y aún cree que puede seguir tomándole el pelo a quien pase por su vera.

Yo mismo, al escuchar aquello de "No os defraudaré", pensé que, tal vez, aquél individuo con cara de cebollino podría hacer realidad el sueño de muchos —especialmente el de los jóvenes— de tener un futuro mejor, con un empleo estable y donde los contratos basura fueran la excepción y no la regla que a todos nos toca soportar sin tampones ni compresas.

Desgraciadamente para muchos —especialmente para los jóvenes— la situación de ahora es la que todos conocemos. Ahondar en cómo hemos llegado hasta aquí y buscar culpables no ayudará a sacudirnos la profunda decepción de los que recuerdan ese "No os defraudaré". La gente cree en los héroes, buscamos salvadores y cuando estos nos fallan de la manera en la que Zapatero nos ha fallado —especialmente a los jóvenes—, algo se rompe definitivamente. Si encima él y sus compinches continúan sonriendo e intentando hacernos ver que no pasa nada, la decepción se convierte en ira, la ira provoca miedo, y el miedo conduce al sufrimiento... Sufrimos, y no hay ningún Yoda para enseñarnos el camino.

Todo habría sido más fácil, menos doloroso y humillante, —especialmente para los jóvenes— si aquel 14 de marzo del 2004, desde el balcón del número 70 de la Calle Ferraz, José Luis Rodríguez Zapatero, simplemente hubiera cerrado el pico... ,al menos no nos habría defraudado.

martes, 28 de septiembre de 2010

Sobre huelgas y razones...




¡Vamos a la huelga!

Por los que nos han llevado a esto...

Por los que sonríen cuando no deben...

Por los que siempre ganan y nunca pierden...

Por los que fuman habanos y meten puros...

Por los que están ERE que ERE...

¡Vayamos a la huelga!

Por los hijos que no nos atrevemos a tener...

Por los padres que nos tuvieron...

Por los que no podrán estar...

Por los que quieren estar...

Por los que nunca dicen nada...

¡Vamos a la huelga!

Por los "o lo tomas o lo dejas"

Por los rojos que sí hacen daño, los de la cuenta...

Por los días en blanco y las noches enmarronadas...

Por los despidos sin pedir...

Por los contratos de obra y vicio...

¡Sí, vayamos a la huelga!

Huelga decir que no servirá para nada...

viernes, 24 de septiembre de 2010

Sobre Pilar, el Chagas y la Esteban




Se llama Pilar Mateo, es de Valencia y ha creado una pintura que ayuda a miles de personas a vencer una enfermedad, el Chagas, que afecta a a millones de personas en América Latina.

El Chagas es una de esas enfermedades que no debería existir. Desde hace 100 años se sabe que la transmite un insecto llamado vinchuca, una especie de chinche que habita en los miserables hogares de personas invisibles a los ojos de Dios y la sociedad.

Su método para combatir esta sonrojante realidad es bastante simple... Pinta las casas de esta pobre gente con una mezcla compuesta de pintura y un insecticida que inhibe el crecimiento de la vinchuca. Desde que en 1995 empezó a darle a la brocha, ninguno de los niños que viven en casas coloreadas con el tinte prodigioso ha contraído la enfermedad. La mismísima OMS ha avalado su sistema.

El suyo es uno de esos ejemplos que nos hacen recobrar la esperanza en que, a poco que queramos, construir un mundo mejor es posible... Lo triste es que esa esperanza no dura demasiado.

Esta misma noche, en TVE, he podido ver a Pilar Mateo contarnos su particular batalla contra el Chagas. Al mismo tiempo, Tele 5 emitía el documental 'La princesa del pueblo', en el que se analizaba la vida de Belén Esteban... ¿Adivinan qué espacio ganó la batalla de las audiencias? Pues eso.

Un país está bien jodido cuando gran parte de su masa social conoce, admira y sigue las 'hazañas' de Belén Esteban y en cambio no tiene ni pajolera idea de quién es Pilar Mateo (y tampoco le interesa). Quizás tengamos lo que nos merecemos: paro, fracaso escolar, fuga de cerebros, políticos de risa, violencia machista... Por mucho que nos fastidie sólo somos unos catetos; una panda de marujas cuyos máximos referentes son Ana Rosa Quintana, La Esteban y Jorge Javier Vázquez. Tal vez Victoria Beckham (otra gurú de la cultura) supo calarnos a la primera cuando dijo aquello de... "España huele a ajo".

viernes, 10 de septiembre de 2010

Sobre toros y justificaciones




Los defensores de las corridas de toros dan varias razones para convencer al resto del mundo de las bondades de la 'Fiesta Nacional'. Voy a intentar desmontar las más socorridas...


1- El toro bravo no existiría sin las corridas.

Éste es uno de los argumentos preferidos a la hora de dar matarile a los toros. Al principio suele colar, pero si se piensa bien no tiene mucho sentido... La razón es bien simple: a un toro se la pela si su especie, como tal, sigue perdurando en siglos venideros. Es decir, los toros (y el resto de animales) no tienen consciencia de pertenecer a una raza ni especie concreta, ni pueden sentir pena si esa raza desaparece. Ninguna especie extinta ha sentido lástima por el hecho de desaparecer... En ningún momento el último de los dodó supo que con él, su árbol genealógico se iba al carajo. Es el hombre al que le preocupan esos temas.

Además, se da la circunstancia de que este animal ya existía muchos siglos antes de las primeras corridas de toros; o sea, que no fue precisamente el hombre el creador de esta raza (aunque sí de la mezcla de ejemplares para mejorarla). Una especie necesita millones de años para evolucionar, y si el toro hoy día es inviable en libertad es precisamente por culpa del hombre, que todo lo cuantifica en dinero y arrasaría con las dehesas si no le fueran útiles. Esgrimir que, gracias a la fiesta, estos ejemplares aún siguen existiendo es ser un cínico y un perdonavidas al que ningún torito va a agradecer el detalle. Aún así ya se buscarían alternativas para que los astados no desaparecieran por si algún alma sensible lamenta un futuro tauricidio.



2- Las corridas de toros generan empleo.

Evidentemente..., ¡y hace 200 años el comercio de esclavos también lo generaba! (excepto para los propios esclavos que curraban sin paga alguna). Hoy día hay muchas cosas repugnantes que generan empleo: la prostitución, el tráfico de drogas, el terrorismo... Y no hablo de los que se dedican a tales menesteres, sino también de los que trabajan para evitar que la cosa vaya a más (policias, trabajadores sociales, escoltas...).

Antiguamente (y no tan antiguamente) existían oficios y trabajos que han ido desaparciendo por mor de los tiempos. Estos trabajadores se iban reciclando o aparecían nuevas actividades que sustituían a las anteriores... Los ejemplos son múltiples: balleneros, escribas, fabricantes de máquinas de escribir... e incluso respostadores de gasolina y operadores de cine (esto último es una especie de broma). Definitivamente el argumento del empleo es muy débil, aunque, tal y como están las cosas, convence a ciertos políticos.


3- El toro no sufre en la plaza.

Otro de los 'imprescindibles' en el discurso de cualquier taurino que se precie. Casualmente para ellos, también se decían cosas parecidas cuando la esclavitud era legal... "a los negros no les pesa trabajar de sol a sol durante horas".

Es bien sabido que los humanos somos especialistas en buscar justificación a lo injustificable. Los esclavistas daban la suya, los nazis igual, el musulman que lapida a una mujer también cree hacer lo correcto, e incluso los violadores y pederastas seguro que se consideran a sí mismos unos amantes incomprendidos... Si me apuran, cualquiera de nosotros se justifica a diario de cosas que en el fondo sabemos que no tienen defensa alguna. No hay que ir muy lejos, aquí en Internet podemos encontrar todo tipo de teorías, elucubraciones y argumentos para casi cualquier cosa... Éste humilde blog es una buena prueba de ello.

Pero la realidad es terca y lo más probable sea que al toro le duelan los puyazos, las banderillas y las estocadas. Que le duelan a rabiar, aunque su fortaleza les haga seguir luchando. Yo he visto algunos toros en el campo y he observado que se quitan las moscas con el rabo... Si sienten una mosca en el lomo, deben sentir el acero de una espada ¿No?


4- Los toros representan a España y son parte de nuestra identidad cultural.

¡Ahí queda eso! No sé los demás, pero yo prefiero que conozcan más a España por sus Premios Nobel (pocos), por sus servicios sociales (cada vez menos), por sus monumentos (algunos se caen), por sus playas (el Prestige dio la vuelta al mundo)..., que por la 'Fiesta Nacional'. Deberíamos aceptar el paso del tiempo, y comprender que —igual que ya no se adoran a dioses romanos, ni se ara con bueyes— a los toros se les ha pasado su tiempo, o al menos cada vez les queda menos (aún hay muchos aficionados, eso hay que reconocerlo).

5- Hay otros problemas más graves, incluso en lo que concierne a los derechos animales.

Pues sí, aquí tienen razón los taurinos. Existe hambre, guerras, contaminación, paro, corrupción... Millones de animales mueren de forma miserable en granjas infectas, se degrada el medio ambiente. El toro, mientras tanto, vive cuatro o cinco años felices en las dehesas; aunque —eso sí— después muere de forma humillante solamente para divertir a unos cuantos. Por todo ello, cuando en mi casa tenga goteras, dejaré la avería tal cual... Seguro que en África me aplaudirán el gesto.

6- Los toros es un arte.

Bueno, eso lo decimos aquí en España. Imagino que en otros lugares no estarán tan de acuerdo. Reflexionar sobre lo que es arte y no lo es ha traído de cabeza a cerebros mucho más capacitados que el mío para estos temas. Yo sólo me permito apuntar que, en el sentido estricto, casi cualquier actividad más o menos estética en la que se pueda mejorar con algo de técnica y grandes dosis de paciencia, es susceptible de ser considerada arte. Por ejemplo, la mayoría de los deportes; o incluso casi todas las tareas que necesiten de habilidad manual... Si me apuran hasta jugar a los bolos podría ser un arte. Todo consiste en buscarle la estética a los movimientos, a las repeticiones, hasta alcanzar la máxima perfección en lo que se hace.

Lamentablemente para la gran mayoría de gente entendida en asuntos artísticos, un arte también tiene que tener (además de la estética) un complemento emotivo (los toros sí es cierto que lo tienen, aunque algo sádico) e (aquí la gran pega) iluminador. Es decir, que quien contemple esa obra o esa acción, acceda a una realidad que antes desconocía y que el artista le revela. Habrá quien argumente que los toros poseen ese factor, pero yo tengo mis dudas. Además, incluso los mismos aficionados reconocerán que ver arte en una plaza es una cuestión de suerte, y que te puedes pasar meses y meses sin catar las 'esencias del toreo'. Afortunadamente, el resto de los mortales podemos saborear arte sin sufrir decepciones... sólo tenemos que ir a un museo, escuchar a Leonard Cohen o leer un libro de Dostoievski.

domingo, 29 de agosto de 2010

Sobre secuestros, ayudas y verdades





Mali, 12 de mayo del 2010


Estimado Presidente:


Las circunstancias que actualmente padecemos mis compañeros y yo me obligan a hacerle la siguiente confesión...

Confieso ser un empresario que, hasta hace bien poco, escatimaba el sueldo y los derechos laborales de mis 140 empleados.

Admito que para limpiar mi conciencia, adquirir prestigio social y desgravar impuestos, fundé con otros socios la ONG 'Tierra de Paz'.

Reconozco que en febrero del año en curso organicé una expedición a Mali con el objetivo de pasar unos días de diversión en un entorno excitante y, de paso, ayudar un poco a los pobres de este país.

Es verdad que, en algún momento, se me pasó por la mente intentar copular con alguna de las lugareñas, aprovechando mi condición de europeo y las ventajas que en ello pudieran ver las mujeres de Mali.

Mía es también la culpa de insistir en que la expedición pasara por un lugar expresamente desaconsejado por el gobierno que usted preside; lo hice por añadir un plus de emoción al viaje.

Reconozco haber sentido pánico cuando nos tendieron una emboscada y nos encañonaron con fusiles.

Admito que estoy aterrorizado en este cautiverio. Mis compañeros están igual de asustados que yo.

Finalmente, confieso que mis captores me han obligado a escribir esta carta para escupirle a usted toda mi verdad, so pena de ser ejecutado al instante si intuyen una sola mentira en mis palabras.

Por favor, le ruego que haga todo lo posible por sacarnos de aquí. Que pague lo que sea necesario, o que nos intercambie por los terroristas que haga falta. Sé que con ello se financiarán más asesinatos y secuestros; pero soy un cobarde y quiero seguir siendo el tipo sonriente y pagado de mi mismo que era antes de estar aquí.


Atentamente, Alonso Carreño (Presidente de la Fundación 'Tierra de Paz').

sábado, 24 de julio de 2010

Sobre deseos, miedos y esperas



















Jamás temí encallar en las afiladas rocas que protegen tu deseo.
Y mientras sonreía confiado, despanzurraste mis entrañas.
Inmóvil, casi ridículo… a la espera.

Nunca imaginé ser el verdugo de tu orgullo.
Y mientras inclinabas tu cuello, recordé mi máscara.
A la espera, inmóvil… casi ridículo.

Ni en sueños de peyote y tequila logré verlo todo tan claro.
Y mientras despertaba a oscuras, me cegó tu faro.
Casi ridículo, a la espera… inmóvil.

Por nada del mundo quise quererte tanto.
Jamás, nunca… Ni en sueños.
Y mientras tragábamos miedo me diste tu mano.
Inmóviles, casi ridículos… a la espera.

martes, 20 de abril de 2010

Sobre volcanes, aviones y orgullos














Un pequeño cráter islandés despertó...
Como una de esas promesas añejas que reclaman ser satisfechas.
Europa, altiva y frívola, ya la había olvidado...
Al mismo tiempo que el humo asciende a los cielos, nuestros humos descienden al suelo.
Adiós Kyoto. Bienvenida la incertidumbre...
Ni las cenizas de Auschwitz consiguieron paralizar al mundo.
Tampoco las de Hiroshima.
Ni siquiera las de las Torres Gemelas...
Los muertos no nos pesan...
Ha tenido que ser un pequeño cráter islandés el que ponga de rodillas nuestro orgullo.
Y ahora, como esas niñas preguntonas, una duda nos tira de los pantalones...
Si este cráter es pequeño... ¿Qué no hará uno grande?
De momento tendremos que abrigarnos.

lunes, 8 de marzo de 2010

Sobre Oscars y Goyas...



¿Cómo es posible que 'El secreto de sus ojos' haya ganado el Oscar a la mejor película de habla no inglesa y que aquí en España sólo ganara dos Goyas? La respuesta es fácil: nos creemos muy modernos, pero sólo somos unos paletos.

Y es que el Oscar a 'El secreto de sus ojos' ha sido una bofetada sin manos, ya no sólo a los Goyas, sino a nuestra estúpida manera de hacer las cosas. Én un país donde en determinadas comunidades autónomas se vetan autores españoles en favor de los del terruño, donde se obliga por ley a que los comerciantes pongan sus rótulos en catalán, o donde se hacen campañas publicitarias de asuntos que provocan el bochorno propio y ajeno, no debe extrañarnos que prefiramos premiar a una película aceptable y 100% española (Celda 211) mucho antes que a una obra maestra que, mayoritariamente, es argentina... Así nos luce el pelo.

Seguimos siendo esos racistas que arrasaron con todo en América. Seguimos mirándonos el ombligo extrañados de que a los demás no les parezca tan encantador como a nosotros. Seguimos siendo unos catetos provincianos ocultos tras ropa de Zara... Menos mal que de vez en cuando alguien nos recuerda lo que somos; esta vez han sido unos tipos de Hollywood, quién sabe mañana.

domingo, 28 de febrero de 2010

Sobre Dios y su creación...



¿Y si nosotros, simples humanos, fuésemos los creadores de Dios?

No me refiero a que la religión sea un invento para controlar a la gente o darles simplemente esperanzas...; eso ya está muy trillado. Quiero decir literalmente que, quizás, nosotros los hombres estemos creando a Dios sin tan siquiera saberlo.

Es una idea que me ronda la cabeza desde hace algún tiempo... Dios no existe todavía, pero dentro de varios miles de años existirá...

Me explico. Nuestra civilización surgió a partir de una simple célula y aún continúa en evolución. Cada vez llegamos más y más lejos y nuestra capacidad no parece tener fin...

Nuestra inteligencia ha alcanzado cotas inimaginables hace tan sólo unos pocos siglos. Intuyo que dentro de varios cientos de años seremos capaces de superar nuestras barreras biológicas y crearemos máquinas y hombres-máquinas mucho más inteligentes de lo que somos ahora.

Esa inteligencia, la humanidad entera, se expandirá fuera de este planeta. Las máquinas crearán a su vez otras máquinas increíblemente inteligentes con todo el saber acumulado de nuestra historia. Conquistaremos otros mundos... el Universo.

No se parecerá a nada de lo que conocemos ahora. Imagino que con el tiempo no hará falta ni tan siquiera un soporte físico para albergar esa inteligencia. Una inteligencia que, además, se comunicará con el resto hasta formar un todo, un ente infinitamente inteligente y omnipresente... Dios.

O sea, que a partir de un humilde origen biológico que surgió hace millones de años en un rincón apartado del cosmos, la Tierra, dentro de otros tantos millones de años lo que existirá será una inteligencia suprema que todo lo controle y todo lo sepa...

Tal vez divague en exceso, pero quiero creer que como el tiempo es algo relativo, ese mismo Dios que aún no existe, pero que existirá, podrá romper la barrera temporal y que por ello ahora mismo nos está viendo y sabe de nuestras pequeñas miserias y deseos. Por eso, a lo mejor, sí es verdad que nos oye y nos escucha cuando le rezamos.

No sé si lo que digo es una locura o un pensamiento revolucionario. Sólo supongo que tal vez la historia no es como nos la han contado, sino que es completamente al revés: Dios no nos creó..., nosotros en el futuro le crearemos a él.

Por eso creo que Dios habita en cada uno de nosotros. Pienso que todas las miles de millones de vidas, hasta la más pequeña, que en el mundo han existido y existirán tenían un propósito, un fin... crear a Dios.


sábado, 6 de febrero de 2010

Sobre Haití...




Haití, Haití, Haití...
No hay mal que cien años dure... excepto en Haití.
Nos impresionan más los muertos que los hambrientos...
Pero los muertos están muertos.
Y los hambrientos...
Todos los males de nuestro siglo se concentran en Haití.
También nuestros pecados están en Haití.
Quizás el infierno sea nacer en Haití...
Dios aprieta pero no ahoga... excepto en Haití.